Captura del Lobo Valencia generó un conflicto por el negocio en la ZMG.
Guadalajara.- Desde la captura de Oscar Orlando Nava Valencia, el Lobo, ex líder del cártel de Los Valencia en Jalisco, comenzó una batalla que se ha desarrollado en dos sentidos en el área metropolitana de Guadalajara: una venganza contra los que favorecieron la detención del capo y una lucha por el control del negocio de la venta y distribución de drogas, principalmente metanfetaminas y crystal.
Guadalajara.- Desde la captura de Oscar Orlando Nava Valencia, el Lobo, ex líder del cártel de Los Valencia en Jalisco, comenzó una batalla que se ha desarrollado en dos sentidos en el área metropolitana de Guadalajara: una venganza contra los que favorecieron la detención del capo y una lucha por el control del negocio de la venta y distribución de drogas, principalmente metanfetaminas y crystal.
En los más recientes cuerpos de ejecutados hallados en Zapopan, Tlajomulco e Ixtlahuacán de los Membrillos (el 27 y 28 de mayo, así como el 2 de junio pasados, respectivamente) según los reportes de las investigaciones de personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Jalisco (PGJEJ), existen mensajes que hacen referencia a presuntos ajustes de cuentas entre dos grupos rivales.
Las fuentes consultadas indicaron que los descuartizados encontrados en Zapopan y Tlajomulco el 27 y 28 de mayo pasados mandaban un recado de advertencia al cartel de Los Torcidos, cuyos integrantes son llamados así por haber pactado y orquestado con una célula del cártel de Sinaloa la denuncia de los movimientos de El Lobo ante el Ejército, para que fuera detenido en su casa de Tlajomulco el 28 de octubre de 2009.
A estos se suma el caso del hombre colgado en el puente de acceso al municipio de El Salto, sobre la carretera a Chapala, en donde quien fue identificado como Ismael Ibarra Sánchez, de oficio llantero y vecino de la colonia El Colli en Zapopan, tenía también un mensaje para Los Torcidos.
La pelea por el control de la plaza se originó porque gente de Orlando Nava buscó apoderarse del territorio que se había ganado desde el primer trimestre de 2009, el cual incluía el corredor Colima-Guadalajara, el Estado de México, el Distrito Federal y algunas partes del centro del país, como Michoacán, según reportes de autoridades federales, que indican que entre los dos grupos antagonistas hay gente con el apellido Valencia, pertenecientes a la familia de narcotraficantes. En el de Los Torcidos destacan los apellidos de Valencia Salazar, Cardona Chardini y Arzola Ortega.
Al intento del ahora llamado grupo de Los Torcidos para hacerse de la plaza heredada por el Lobo, sus rivales respondieron con saña. Identificaron a la gente que los primeros habían traído para llevar a cabo levantones y otros trabajos, los retuvieron y posteriormente los descuartizaron, mandando mensajes inscritos en los cuerpos de los cadáveres para advertir a sus rivales de que no se iban a quedar con el negocio que dejó Nava Valencia.
Ante la confusión de los descuartizados encontrados durante el mes de mayo y principios de junio, periodo en que se han registrado por lo menos trece ejecuciones de este tipo, el grupo que se adjudicó los hechos mencionó en uno de sus narcomensajes que no eran Zetas y ante el móvil se comenzó a sospechar que se trataba de este grupo criminal.
Las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Jalisco (PGJEJ) investigan los crímenes tras la identificación de varios de éstos sujetos.
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